Algo debe de haber en mi alma. Me he fijado que en la tetera había una mácula. Como un jirón mate que mancillaba tanto brillo. Siempre va conmigo un pañuelo blanco. Lo he aplicado a la alevosa mancha. Persistía. He frotado con más ímpetu. Persistía. He desistido de mi pañuelo. Con saña he raspado con un cepillo temiendo herir la plata. La tacha persistía. Afrentosa. Muy picado, he decidido recuperar mi pañuelo. Cándido. He acercado la tetera a mi boca y le he exhalado aliento. Rápidamente la he acariciado con el lienzo. La mácula se ha rendido a mis adentros. Se ha perdido. Todo era espejo. No me cabe duda. Algo muy puro debo de tener en mi alma.
De "Teoría de Fragmentos"
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