domingo, 8 de septiembre de 2013

Hiena

Hace tantos versos. Hace ya tantos versos que no. Así que. Aquí. Ahora. Tísico de poesía. He perdido, sí, la costumbre de tu pecho. Una cruz. Hay una cruz clavada en cada beso que no te alzo. El tiempo terco. Degollado. Y, en consecuencia, el dolor me crece como uñas. Soy no más que la víspera de que me renegaras. Escribo desde la hiena. Soy no más que una hiena humana. Completamente. Completamente hienando. Llenándome de… También he muerto. Me he muerto sólo un poco. Hasta los tuétanos. Ya no está dios. Con nosotros. Ya no nos está dios. Nuestro dios que era simple carroña. No nos resta, siquiera, tierra. Ni ejercicio metafísico.

28 - 7 - 13

No hay comentarios:

Publicar un comentario